Visita guiada a «Warner Bros Studio Tour : The making of Harry Potter»

Están situados en Watford, a unos treinta kilómetros de Londres, y se puede acceder fácilmente a ellos ya que existe un servicio de buses desde Londres. En este artículo, os quiero ofrecer una visita guiada de los estudios, hablaros de cómo están organizados, de lo que se puede ver y hacer… pero sin entrar demasiado en detalles. ¡ Hay que guardar magia para cuando vayáis vosotros !

¿Listos? ¡Vamos!

La verdad es que la magia empieza apenas salimos del coche. Dirigiéndose hacia la entrada, se pueden admirar tres piezas del tablero de ajedrez mágico de Harry Potter y la piedra filosofal. Siento decepcionaros pero no se mueven, pero aún así son imponentes y dan una idea de lo que se va a poder ver adentro.

¿Entramos ahora? Ya estamos en el hall.

Las paredes están llenas de fotos de los personajes más emblemáticos de la saga. También está colgado el Ford Anglia de los Weasley que vemos en Harry Potter y la cámara secreta. Ahora toca esperar la hora de la visita, para pasar el tiempo y no morir de impaciencia, se puede curiosear la tienda de souvenirs. ¡ Es impresionante ! Se encuentra de todo, desde los uniformes de los alumnos de Hogwarts hasta objetos de coleccionismo como el Nimbus 2000, pasando por peluches, sin olvidar dulces mágicos.

Ya es la hora, ¿tenéis vuestra entrada? 

Bien, seguidme por favor. La primera etapa de esta visita toma lugar en dos salas de cine. El personal de los estudios nos enseña videos que recuerdan el fenómeno que fue (y sigue siendo) Harry Potter mundialmente y explican cómo los libros fueron llevados a la gran pantalla. Y luego, empiezan las cosas serias. 

¡El Gran Comedor!

Es bastante emocionante estar en esta sala donde ocurren tantas cosas a lo largo de la saga. Está casi tal y como se ve en las películas. Hay tres mesas montadas y está expuesto el vestuario de los alumnos y profesores de Hogwarts. Es la única parte de los estudios donde el tiempo está limitado, pero hay tiempo suficiente para echar un buen vistazo a los platós, a las estatuas, a la ropa, y apreciar el trabajo minucioso del equipo técnico de las películas. Con un decorado así, no es difícil imaginarse sentado en un banco escuchando un discurso de Albus Dumbledore o degustando un festín encantado con los alumnos de Gryffindor. Pero ya se nos acaba el tiempo, vamos.

Ahora toca la mejor parte de los estudios. 

¡El paraíso de cualquier fan de Harry Potter!

Centenas y centenas de objetos utilizados en las películas : pelucas, ropa (¡ el traje de baile de Ron en Harry Potter y el prisionero de Azkaban es realmente horroroso !), cuadros y todo tipo de objetos mágicos como la Snitch dorada o la maleta del profesor Lupin, por citar algunos.

También se pueden ver decorados enteros como la sala común de Gryffindor o la cocina de los Weasley (¡ podéis mover unos objetos con una pantalla táctil, totalmente mágico ! ), entre otros. 

Cuando se ve una película, es fácil ver si se cuidaron el vestuario y los decorados, pero tenerlos ante los ojos es alucinante. Uno se da cuenta de la cantidad de trabajo necesario y de lo meticuloso que se tiene que ser para crear un mundo asi.

¿ Estáis deslumbrados ? Bueno, eso no es todo. Falta la pantalla verde. ¡ No seáis tímidos, lo vais a pasar genial ! En una escoba, con un disfraz de mago y un empleado de los estudios dirigiendo, vais a protagonizar una peliculita volando por Londres y diversos paisajes de la saga y un par de fotos jugando Quidditch o sobrevolando Hogwarts. Y la verdad es que quedan bastante bien, son recuerdos muy originales y muy chulos. 

¡Ahora tenemos que ir afuera!

Toca un paseo donde se pueden ver decorados exteriores, como la casa de Privet Drive o el cottage de los padres de Harry por ejemplo. Pero lo que no hay que perderse aquí, es la cerveza de mantequilla. Tenéis que probarla. Es rica aunque algo empalagosa, así que os recomiendo comprar una pequeña. ¡ Quedáis avisados ! Luego, empezamos la última etapa de la visita. Es una visita más técnica, dedicada a los croquis y las maquetas de pre-producción, a los animatrónicos y a los maniquís a escala real usados para las escenas peligrosas. Es interesante, pero tengo que admitir que es la parte que menos me emociona.

Falta poquito pero no estáis tristes, la visita se termina de manera espectacular. Primero, vamos de tiendas en el Callejón Diagon, paseando y mirando los escaparates como un buen mago. Son muy cuidados y parecen auténticos, da ganas de entrar a Ollivander’s y de comprar una varita mágica.

¡ Y llegamos al gran final ! 

La maqueta de Hogwarts, fue construida a mano en una escala 1:24, ¿ hace falta decir que es impresionante ? Fue escaneada digitalmente para las escenas con CGI y también la utilizaron para los planes aéreos. Cuando veo las películas, pienso que es un castillo que existe de verdad, es una obra de arte y otra prueba del gran trabajo que hicieron en estas películas.

Espero que hayáis disfrutado la visita. ¿ Os animáis a ir ? ¿ Ya lo habéis visitado ? Esperamos vuestros comentarios.

Por cierto, las imágenes que acompañan al artículo, las podéis encontrar en alta resolución en el siguiente álbum adjunto