Crítica de El Llanero Solitario: Pasable cinta familiar de aventuras

EL LLANERO SOLITARIO (The Lone Ranger) aterriza en nuestras carteleras éste miércoles 21 de Agosto de la mano de The Walt Disney Pictures Spain. Una superproducción del equipo responsable de la exitosa saga “Piratas del Caribe”. El film está dirigido por el realizador Gore Verbinski , encargado también de producir la cinta junto a Jerry Bruckheimer. La historia y adaptación del guión es obra de Ted Elliot, Terry Rossio y Justin Haythe.

EL LLANERO SOLITARIO cuenta con un reparto de lujo capitaneado por el camaleónico Johnny Depp con el co-protagonismo del actor Armie Hammer, a los que les siguen estrellas del calibre como Tom Wilkinson, Helena Bonham Carter, William Fichtner, Barry Pepper, James Badge Dale y Ruth Wilson.

Esta nueva adaptación del afamado personaje de western creado por George W. Trendle y Fran Striker, conocido por el serial de radio que cumple este año 80 años desde su debut en 1933 y la serie de televisión, nos muestra las aventuras y el nacimiento del héroe enmascarado (Armie Hammer) que junto al indio llamado Tonto (Johnny Depp) tendrán que aunar fuerzas cuando un grupo de Rangers de Texas sufre un ataque por parte de una banda de forajidos.

Se trata de un blockbuster muy esperado, y a la vez muy criticado, con un poderoso plantel de actores que magnifican esta divertida cinta familiar de aventuras que hará las delicias de los más pequeños de la casa. Con escenas al más puro estilo tejano y un solvente Johnny Depp con su sello de identidad camaleónica, que a pesar de haber sido criticado por su actuación comparándola con la del mítico personaje de la saga de Disney, Piratas del Caribe, el capitán Jack Sparrow, y que está encasillado en los mismos roles con las mismas gesticulaciones, su interpretación de un indio guerrero y espiritual con cuentas pendientes, resulta atrevida y rocambolesca. Johnny Depp tomó como fuente de inspiración a “Buster Keaton” para meterse en la piel del personaje de “Tonto”.

EL LLANERO SOLITARIO fluctúa entre tramos bajos y altos, durante su visionado, la trama a veces entretiene y otras cae en el tedio, peca de excesivo metraje y el protagonista Armie Hammer no tiene el carisma suficiente como para sentir las palpitaciones del héroe enmascarado. En su balance positivo, cuenta, con escenas de acción trepidantes y situaciones muy divertidas que sacan adelante el largometraje ataviadas con la música del premiado compositor Hans Zimmer. Una fotografía deslumbrante a manos de Bojan Bazelli el cual ya trabajó con el cineasta Gore Verbinski en la versión americana de “The Ring” y una ambientación de la época y vestuario dignos de mención y de destacar.

Hay personajes desaprovechados, como el de la excéntrica Helena Bonham Carter, con una escasa aparición en pantalla, pero que luce estupenda en su pequeño papel como la madame Red Harrington. Otros, como el del villano al que da vida William Fichtner (Elysium) y del magnate de Tom Wilkinson (La Conspiración) también están notablemente interpretados.

Parte de la historia está presentada través de flashbacks y el uso excesivo de esta técnica cinematográfica durante el film puede crear lagunas y llegar a desviarnos de lo más esencial, imbuirnos en el periplo de estos dos personajes tan insólitos como inseparables, con el jinete John Reid, su antifaz negro y sombrero blanco a lomos de su hermoso caballo blanco Silver y el sentir del sabor del lejano oeste como cuando “El Llanero Solitario” debutara en una radio de Detroit el 30 de Enero de 1933.