Para mí tu Carne: Antología de relatos zombi

Hace ya algún tiempo que os hable de «Para Mi tu Carne» (incluso lo incluí en el especial de libros de zombis patrios que hice para Halloween) , un recopilatorio de relatos de temática «z» que ha sido escrito por miembros del colectivo «Sevilla Escribe» para la editorial «23 Escalones» y en el que os podéis encontrar historias escritas por doce autores entre los que se encuentran Carlos Sisí (Los Caminantes), Virginia Pérez de la Puente (La Elegida de la Muerte), Alejandro Castroguer (La Guerra de la Doble Muerte) o Juan de Dios Garduño (Y pese a todo).

Disco Jack – Manuel Mije

Esta historia esta escrita como si de un rap se tratara, y nos habla de Disco Jack, un exterminador de zombis, un tipo duro con el que solo te recomendaría cruzarte en caso de que una horda zombi te persiguiera. No soy mucho de rap, pero admito que el formato del relato es de lo más original que he leído en mucho tiempo.

Severo en lo Alto – Pedro Escudero Zumel

Imagina un pueblo de esos perdidos en la sierra. Todos tienen su campanario. Pues ahora piensa en que las calles de dicho pueblo están plagadas de zombis y que un anciano los va eliminando poco a poco desde la torre de la iglesia y tendrás la base de este relato, en el que el final nos muestra que las costumbres de la gente pueden perdurar incluso tras la no-muerte.

El relato cumple con lo que se espera, y sorprende al final.

Dos Pies izquierdos – Alejandro Castroguer

En casos desesperados, medidas desesperadas. Eso es lo que debió pensar el protagonista de este relato, que pasa de ser un respetable vecino, a convertirse en un superviviente nato en esta historia contada a caballo entre su vida anterior en una comunidad de vecino y su encuentro con unos pandilleros refugiados en una catedral.

Se nota que Castroguer se encuentra mas cómodo escribiendo historias largas, y en esta se nota su calidad como escritor.

La regla numero siete – Carlos Sisí

Con claras referencias a «Bienvenidos a Zombiland«, el relato del escritor de la saga «Los Caminantes» nos muestra como dos supuestos amigos se pueden enfrentar por un despiste que les haga inflingir las pocas reglas que deben mantenerlos con vida en un mundo repleto de zombis.

Aun no he leído los Caminantes, pero esperaba con ansias el relato de Carlos Sisí, y me ha sabido a poco.

El viejo que cada día veía morir el sol desde su azotea – Juan de Dios Garduño

Un relato escalofriante donde los protagonistas son un viejo atrincherado en su casa, y una niña que se esconde en un contenedor de basura para salvarse de los zombis. La niña pide ayuda, pero la cobardía que mantiene con vida al anciano, solo conseguirá empeorar la situación para esta pobre desgraciada.

Triste, duro, salvaje y conciso. El relato va al grano, y refleja los cambios de un mundo donde la muerte es posiblemente la salida mas viable, pero no la mas fácil de alcanzar.

La marca del norte – Pedro Escudero Zumel

Militarismo post apocalíptico para una historia que presenta un desenlace bastante curioso. Y es que a veces la tarea que uno cree que puede beneficiar a la mayoría no es la opción correcta.

Curiosa y original

Follarse a una muerta – Juan de Dios Garduño

Coge la película «Cuenta Conmigo» (basada en un relato de Stephen King) y súmale un toque zombi. Así tendrás algo parecido a este relato en el que la crueldad de unos gamberros un poco retorcidos se vera castigada de una forma menos sangrienta de lo que me esperaba.

Esos pequeños detalles – Miguel Mije

La soledad es un mal que afecta a nuestros días, y que en caso de Apocalipsis z también afectaría a algunos ¿afortunados? supervivientes. El protagonista de esta historia se siente solo, y aunque ha encontrado un método para tener compañía nunca perderá la esperanza de encontrar a gente con vida que le quieran acompañar en este mundo donde al final… los pequeños detalles marcan la diferencia.

Me encanta como escribe Miguel Mije, y este relato es sin duda uno de mis favoritos de toda la antología. Muestra una serie de realidades (ya se que todo es ficción) que son mas que probables en un mundo tan terrorífico como el que plantea e incluso nos hará empatizar con los muertos vivientes.

Blanco Muerte – Juan Ángel Laguna

La no-muerte no tiene porque llegar a lo grande. Quizás espera en una casa en la forma que menos te esperas, y si eres un yonki con ganas de apropiarte de lo que no es tuyo, es probable que salgas robado de algo mas importante que un puñado de euros.

Me encanto el principio, el planteamiento, pero el final me lo esperaba mas en plan ¡¡¡ cuidado con lo que hacéis !!!… o simplemente mas explicito. Aun así es un buenísimo relato.

Vals for Debby – Alejandro Castroguer

Un medico, un soldado americano, y un incidente militar en Almería con conexiones con la bomba que cayo en Palomares.

Una historia muy bien escrita, y con los toques adecuados para un relato zombi muy especial y, si… muy de mi gusto

No temas al hombre del saco – Juan Ángel Laguna

Este no lo entendí muy bien, pero es que no pillo la conexión entre el hombre del saco y los zombis. Aun así resulta desconcertante y refleja lo miedos de los niños, unos miedo que afortunadamente ( ¿ o no tanto?) se están perdiendo en la sociedad actual.

Sangre cuajada de primera Calidad – Vanessa Benitez Jaime

Este relato encantara a los amantes de la fantasía y el terror, ya que lo podría calificar como el más friki del recopilatorio. Solo os diré que hay detectives, personajes muy conocidos de la literatura clásica de terror y luchas entre criaturas de ultratumba.

Muy divertido, sin duda.

Juan, el marinerito cantor – Francisco Javier Sosa Garduño

Hay que idear nuevos métodos para acabar con los zombis. Los no muertos están en busca y captura así que se mantienen escondidos, pero ciertas personas con ciertas características especiales se convertirán en la mejor baza para acabar con ellos.

Un relato con el que reirás y comprenderás que no hay que menospreciar a nadie.

Pegarse un tiro y mandar el retrato a Córdoba – Vanessa Benitez Jaime & Alejandro Castroguer

Una niña pasea con su madre y una amiga cuando una desafortunada elección las acercara a un geriátrico en el peor momento que podrían haber elegido.

Escrito a cuatro manos, el relato mezcla de forma curiosa el estilo de Alejandro Castroguer y el de Vanessa Benitez.

Cuando nadie muera Realmente – Félix Morales Hidalgo

Uno de mis relatos favoritos, en los que vemos como las malas relaciones entre un franquista y un comunista pueden «sobrevivir» incluso a la muerte. En esta historia Carmela y Antonia ven incrédulos como el tío Paco vuelve a la vida, trayendo consigo una pequeña parte de la plaga que esta azotando al mundo, y que parece que no ha llegado hasta Valdezampoñas, una aldea perdida en la sierra.

No había leído nada de Félix, pero me encanto esta historia que nos muestra que los vivos siempre son más peligrosos que los muertos.

Soledad – Francisco Jesús Franco

Sobrevivir al Apocalipsis puede convertirse en una pesadilla si lo haces solo, y aun puede empeorar cuando decides salir a buscar compañía.

Con claras reminiscencias a Soy Leyenda, este relato vuelve a demostrar que mejor solo que mal acompañado.

Cera Negra – Virginia Pérez de la Puente

Inquietante relato protagonizado en parte por unos traficantes de cadáveres y por un zombi que ve como de forma conciente esta cometiendo algunos actos deleznables sin poder hacer nada para remediarlo.

Virginia escribe de lujo, pero la historia no ha llegado a engancharme. Acabo de empezar a leer su novela, y espero que no me ocurra lo mismo.

Vainilla – Luisfer Romero Calero

¿ Y si los muertos vivientes han vuelto a la tierra a castigar a los malvados ? ¿ Donde esta el limite que diferencia tus actos de los de otros criminales en una situación tan desesperada ?. Esta y otras cuestiones son tratadas en este relato donde un grupo de supervivientes iran revelando poco a poco los pecados por los que piensan que serán castigados por la horda de no-muertos que acosan su refugio.

Tribulaciones de un seminarista enamorado – Francisco Jesús Franco

En muchos de estos relatos se trata la soledad, pero también existen los impulsos sexuales, unos impulsos biológicos que si eres un tipo duro y sin escrúpulos (y también algo desesperado…. que leches) pueden verse satisfechos por la criatura que menos te esperaras.

Aunque eso si… si eres un tipo con principio (tiene bemoles) no querrás hacer nada sin la aprobación de Dios, así que aprovechando la coyuntura el protagonista cumplirá con su sueño de casarse y de paso ajustara cuentas con un antiguo personaje de su vida pasada.

Estupendo relato, con una narración estupenda, y que te hace empatizar con un tipo que sin duda no querría tener como amigo.